La compra de una vivienda es, sin duda, una de las mayores operaciones económicas que realizamos en la vida. Es por esta razón que, además de comprobar distintos aspectos como la localización, características, habitabilidad, etc, debemos investigar otros datos importantes, como por ejemplo, si tiene cargas económicas o, simplemente, saber a quién pertenece.
¿Qué es el Registro de la Propiedad?
El Registro de la Propiedad es un servicio público dependiente del Ministerio de Justicia. Su función es garantizar la seguridad jurídica en el ámbito inmobiliario. Se organiza en oficinas públicas en las distintas poblaciones del territorio nacional.
La inscripción de un inmueble en el Registro de la Propiedad reconoce jurídicamente al auténtico propietario que puede disponer de su derecho vendiendo o hipotecando la propiedad. Por otro lado, cualquier persona que desee comprar una casa podrá disponer de esta información antes de tomar una decisión.
¿Cuándo acudir al Registro de la Propiedad?
Tenemos que tener en cuenta que el hecho de comprar una vivienda conlleva un cierto riesgo si antes no se toman las medidas necesarias para obtener de antemano cierta información, como verificar el título de propiedad, o saber si la vivienda en cuestión tiene o no cargas ocultas, entre otras cosas. En todo ello, el Registro de la Propiedad va a tener un papel primordial.
Cuando realicemos la compra de una vivienda, hay datos clave que el Registro de la Propiedad nos puede ayudar a obtener:
1- ¿Es la persona que nos está vendiendo la vivienda el verdadero propietario?
Debes asegurarte de que la persona que está cediendo el derecho sobre tu futura nueva casa es, en verdad, el propietario, ya que solo este último tiene la facultad de venderla (a no ser que lo haga a través de un apoderado), y la mejor forma de saberlo es pidiendo a una Nota Simple Informativa en el Registro de la Propiedad.
En la actualidad se pueden pedir presencialmente en el Registro de la Propiedad de cada Ayuntamiento, o bien hacerlo online. En ambos casos el trámite será más ágil si conoces el Código Registral Único (CRU) o el Identificador Único de Fincas Registrales (IDUFIR). Si no dispones de ninguno de estos datos también la puedes obtener con el DNI del titular, o incluso con su nombre. El coste de la petición es de unos 9 € si lo haces a distancia, y algo más barato de forma presencial.
2- ¿La vivienda que quieres comprar tiene alguna deuda que esté por pagar?
Con la compraventa se ceden todos los derechos del vendedor, pero también todas sus obligaciones, por lo que las deudas asociadas a una vivienda también pasan del antiguo propietario al nuevo, y si, por ejemplo, quedase alguna carga hipotecaria o si la vivienda estuviese embargada, tendríamos un serio problema. Todos esos datos los podemos conocer fácilmente informándonos a través del Registro de la Propiedad, y así asegurarnos de que esa deuda sea liquidada o esa situación de embargo restablecida.
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